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Tribunal revoca amparo otorgado a Emilio “N”; residencia regresa a FGR


 Un tribunal federal revocó un amparo otorgado al ex director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio “N”, fallo que ordenaba que su residencia en la colonia Lomas de Bezares, en la Ciudad de México, quedara a disposición de un juez de control que lo procesa por el caso de Agronitrogenados.

De manera unánime, los magistrados del Tercer Tribunal Colegiado en Materia Penal determinaron echar atrás la sentencia dictada en primera instancia, por lo que el inmueble en cuestión deberá quedar otra vez en manos de la Fiscalía General de la República (FGR).

De acuerdo con Milenio, el tribunal no hizo pública la versión de su sentencia y sólo se dio a conocer el sentido de su fallo.

Cabe recordar que el primer aseguramiento del inmueble ocurrió el 28 de mayo de 2019, bajo el acuerdo ministerial FED/SEIDF/UNAI-CDMX/000289/2019, y tuvo como finalidad encontrar a Emilio “N”, para dar cumplimiento a la orden de aprehensión girada en su contra.

No obstante, el ex funcionario del gobierno de Enrique Peña Nieto obtuvo un amparo y se ordenó a la FGR subsanar deficiencias en el procedimiento, pero se dejó claro que si el Ministerio Público consideraba procedente volver a asegurarlo, podría hacerlo, siempre y cuando demostrara que ese bien es “instrumento, objeto o producto de un delito”.

Fue el 22 de septiembre 2020 cuando la FGR aseguró de nuevo la residencia, pero la jueza Ortega Tlapa señaló que el aseguramiento de bienes debe cumplir con las formalidades esenciales del procedimiento, dentro de la etapa de investigación judicial, y si ésta ya se judicializó, debía ponerse los bienes asegurados a disposición del juez de control, “a fin de evitar abusos por parte del ministerio público…”

Ahora, el Tribunal se volvió a pronunciar al respecto y revocó el amparo.

Y es que la residencia de Emilio “N” fue asegurada porque supuestamente fue comprada con dinero que recibidó su hermana Gilda Susana “N” por parte del dueño de Altos Hornos de México, Alonso “N”, con el fin de que el ex director de Pemex adquiriera la planta chatarra de fertilizantes.

La FGR señala que la casa se compró con una transferencia equivalente a 34 millones de pesos, es decir, con 3.4 millones de dólares.

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