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“Fuego Amigo” de los eternos “Vende Tornillos” de Coatzacoalcos contra los verdaderos: empresarios

 


“Fuego Amigo” de los eternos “Vende Tornillos” de Coatzacoalcos contra los verdaderos: empresarios, industriales, contratistas y prestadores de servicios. Comenzó la “guerrita mediática” contra Daniel Aguilar Avendaño, dueño del Grupo Raudales, por el simple hecho de haber ganado una licitación pública nacional para construir y rehabilitar las vías férreas de la Zona Industrial de Coatzacoalcos. Insistimos en un tema, Daniel Aguilar Avendaño y Emanuel Peña, quienes han realizado obras para el gobierno federal, desde hace tiempo son quienes marcan la diferencia en el mundo de la Iniciativa Privada de Coatzacoalcos, pues son hombres que generan derrama económica y crean fuentes de empleo, no solo para Coatzacoalcos, sino para toda la región sur. En todos lados hay envidiosos

En el mundo empresarial de Coatzacoalcos, siempre ha existido el “fuego amigo” y la maldita “envidia”. Desde siempre los hombres y mujeres de la Iniciativa Privada, los que tienen su centro de operación en el puerto, se han golpeado cuando ven que a uno de sus miembros les va bien, es decir, que consigue trabajo para salir adelante con su empresa. ¿Qué es lo que hemos visto en los últimos meses?, que aquí en Coatzacoalcos, los eternos envidiosos se están encargando de mandar a madrear a: empresarios, industriales, contratistas y prestadores de servicios, todo por el simple hecho de tener “chamba”. Hoy en día el “fuego amigo” se centra en la figura de don Daniel Aguilar Avendaño, quien desde hace algunos años, en base a licitaciones públicas nacionales e internacionales, ha ganado varias obras en sociedad con otros valiosos hombres de negocios que son nativos del puerto. Como ejemplo podemos poner, que el señor Aguilar Avendaño, del Grupo Raudales, junto con Emanuel Peña Sánchez, de COPESA, realizaron los trabajos de rehabilitación de los muelles del puerto de Coatzacoalcos. Hoy en día, don Daniel Aguilar, realiza importantes trabajos en la zona industrial de Coatzacoalcos donde tiene bajo su responsabilidad construir y remodelar las vías del ferrocarril, donde lleva como socio a Irving Campos González. ¿A dónde queremos llegar con el presente comentario?, a un solo punto: 1.-Cuando los empresarios y contratistas de Coatzacoalcos son desplazados por los “fuereños”, lo primero que se dice es que los inversionistas 100% de Coatzacoalcos son bien “tontos” y que no tienen la capacidad financiera para invertir en importantes obras del gobierno federal y estatal. Cuando estos mismos inversionistas 100% porteños ganan una licitación, pues de inmediato, en efecto, sus camaradas de la Iniciativa Privada los empiezan a joder mediáticamente para hacer creer que los trabajos les fueron dados por “asignación directa” o bien por tener un “padrino”. ¡Señores!, aquí, desde hace mucho tiempo hemos señalado que Emanuel Peña Sánchez, Grupo COPESA y Daniel Aguilar Avendaño, Grupo RAUDALES, vienen marcando la diferencia en el mundo empresarial de Coatzacoalcos. Ambos varones, es decir, don Emanuel y don Daniel, toda la obra federal que han realizado o que realizan, la han ganado en licitaciones públicas, lo cual significa que nadie les ha regalado nada. Lo que han logrado en obras es en base a su capacidad financiera y su forma honesta de hacer las cosas. Daniel Aguilar Avendaño con el trabajo que realiza en la zona industrial, con las vías férreas, contrato que es de varios millones de pesos, lo que está generando es derrama económica y creando empleos en el municipio de Coatzacoalcos. Otras de las virtudes de Aguilar Avendaño, así como lo hace Peña Sánchez, es que todas las compras para su obra se hacen en Coatzacoalcos. Esa es la gran diferencia que existe entre don Daniel y don Emanuel con el resto de los “vende tornillos” que operan y que tienen su residencia en Coatzacoalcos. Fin del comunicado. “No hay hilos, no hay alambres”. (Artículo escrito por Federico Lagunes Peña).

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